Los anclajes de peso muerto EN-795 se utilizan sobre superficies horizontales que retienen la caída gracias a su propio peso. Deben estar situados a cierta distancia del borde (lugar de riesgo de caída) y la superficie donde se utilizan no deberá desviarse de la horizontal más de 5 grados. Además, no podrá utilizarse en caso de heladas.
Su uso se restringe a terrazas y azoteas planas, y en general, en cualquier lugar plano lo suficientemente grande para que permita respetar la distancia reglamentaria del borde. Para aquellas cubiertas en las que los trabajos sean puntuales y no se quiera comprometer la impermeabilidad de la misma tenemos soluciones de contrapesos.
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